La búsqueda de Ruja Ignatova, conocida por idear un monumental fraude de criptomonedas, se intensifica a medida que el gobierno de los Estados Unidos ofrece una recompensa de hasta $5 millones a quienes proporcionen información que lleve a su arresto. Apodada la «reina de las criptomonedas,» Ignatova ha estado prófuga desde su acusación en 2017, dejando a su paso una estela de devastación financiera con un esquema fraudulento que defraudó más de $4 mil millones a víctimas desprevenidas a nivel global.
El Embajador Kenneth Merten enfatizó la determinación de EE. UU. de localizar a Ignatova y alentó a las personas a brindar pistas que pudieran asistir en la investigación en curso. Estas pistas pueden proporcionarse de forma anónima, garantizando la seguridad de los informantes.
Ignatova, una ciudadana alemana de 44 años con ascendencia búlgara, introdujo inicialmente ‘BigCoin’ antes de lanzar ‘OneCoin’ en Sofía en 2014 junto a su cómplice Sebastian Karl Greenwood. Aprovecharon la emoción en torno a las criptomonedas para atraer a inversores a un fraude multimillonario. Poco después de ser acusada, Ignatova evadió la captura abordando un avión de Sofía a Atenas; y desde entonces, su paradero ha sido un misterio.
La infame «reina de las criptomonedas» fue vista por última vez en Grecia, y se rumorea que alteró su apariencia mediante cirugía plástica para evitar ser detectada. En 2018, su socio Greenwood fue capturado y recibió una condena de 20 años de prisión junto con una orden de restitución de $300 millones. El hermano de Ignatova, Konstantin Ignatov, también involucrado en el esquema, fue arrestado en 2019 y completó una sentencia de 34 meses tras llegar a un acuerdo judicial.
El FBI ha añadido a Ignatova a su lista de los diez más buscados, ya que está acusada de delitos significativos, incluyendo falsificación y lavado de dinero.
Los inversores fueron persuadidos para invertir fuertemente en OneCoin, solo para descubrir que era una farsa sin el respaldo real de la tecnología blockchain prometida. Se encontraron con simples números en sus billeteras al intentar evaluar sus inversiones. La inflación artificial del valor de OneCoin, un intercambio cerrado y manipulado, junto con restricciones en las órdenes de venta, todo apuntaba a un evidente esquema Ponzi.
Mientras continúa la búsqueda de Ignatova, las autoridades búlgaras han iniciado acciones legales para enjuiciarla en ausencia, con el objetivo de incautar activos valorados en más de 10 millones de euros. La lucha por llevar a la «reina de las criptomonedas» ante la justicia refleja las voces de incontables víctimas que demandan restitución y cierre a uno de los fraudes digitales más extensos de la historia.