Los ciberdelincuentes están explotando el reciente anuncio de la campaña del expresidente de EE. UU. para aceptar donaciones en criptomonedas. Una firma de ciberseguridad ha descubierto una serie de sitios web engañosos creados para estafar a los donantes de Trump. Estas plataformas fraudulentas imitan la apariencia del sitio real de la campaña, engañando a los usuarios con nombres de dominio similares y pasarelas de pago falsas.
La firma detectó estos dominios maliciosos alrededor del momento del anuncio de Trump, que coincidió con su condena por delito grave el 30 de mayo relacionada con registros comerciales falsificados. La campaña genuina utiliza Coinbase para transacciones de criptomonedas, pero los sitios impostores prefieren interfaces de imitación que se asemejan a los servicios de Coingate. La sutileza de las prácticas reales de criptomonedas de la campaña en comparación con su representación complican la capacidad de los seguidores de distinguir los esfuerzos de recaudación genuinos de los fraudulentos.
Tras la condena de Trump, su campaña presenció un aumento sustancial de donaciones, lo que pareció inspirar otra ola de intentos de estafa. Los delincuentes están sincronizando sus esquemas fraudulentos con eventos actuales para aumentar sus posibilidades de éxito. Esta estrategia se extiende más allá de las campañas políticas, como lo demuestran estafas similares en torno a los ataques del 7 de octubre y el conflicto en Palestina.
A pesar de la proliferación de estas trampas en línea, el análisis de blockchain indica una falta de ganancias ilícitas sustanciales hasta el momento. Sin embargo, preocupa que a medida que maduren estas estafas, puedan comenzar a atrapar víctimas.
El atractivo de las criptomonedas para los criminales radica en su naturaleza no regulada y en transacciones irrevocables, en marcado contraste con la anterior renuncia de Trump a las criptomonedas durante su presidencia. Ahora, la campaña de Trump y la industria más amplia de la criptomoneda se dedican a asegurar el apoyo político mientras evitan una estricta supervisión regulatoria. Los comités de acción política en el sector de la criptomoneda impulsan esta agenda, con ambiciones de movilizar millones en fondos y votantes.
Hasta el momento, no hay indicios de estafas paralelas dirigidas a los seguidores de Biden, ni la campaña de Biden ha anunciado la aceptación de donaciones en criptomonedas. Sin embargo, especialistas en ciberseguridad anticipan que a medida que las campañas políticas adopten cada vez más las criptomonedas, el potencial para esquemas fraudulentos crecerá de igual manera.